Pablo Romo
Profesor Escuela Impro Impar
Juan es un profesional que trabaja en una gran empresa tecnológica, el año pasado fue asignado a un nuevo proyecto internacional en el que debía trabajar con compañeros de todo el mundo. Aunque Juan tiene un buen dominio del inglés, enfrentarse a comunicarse diariamente en un entorno laboral en otro idioma le generaba cierta ansiedad y preocupación. En especial tenía miedo a equivocarse en las reuniones y presentaciones en ese idioma, muchas veces por videoconferencia y algunas veces en persona. En muchas ocasiones optaba por quedarse callado o intervenir poco.
Este año Juan se apuntó a hacer impro, como un refugio de diversión semanal donde desconectar del trabajo. Y lo que no se esperaba es que se ha convertido en una herramienta en esta transición en su trabajo, ya que la misma soltura y confianza que ha entrenado para crear escenas teatrales ahora le permite soltarse a hablar en otro idioma y adquirir fluidez. Puede que las frases que diga no sean perfectas, puede que se le olvide alguna palabra (o se la invente), pero se atreve y habla. Gracias a la impro, Juan ha logrado no solo mejorar sus habilidades lingüísticas, sino también fortalecer su confianza, creatividad y capacidad de adaptación a diferentes situaciones comunicativas.
Veamos cuales son los mecanismos que la impro le ha aportado a Juan en esta situación:
Favorece la confianza y supera el miedo escénico
La improvisación teatral nos expone a situaciones en las que debemos dejar de lado el miedo al ridículo y la inseguridad. A medida que nos enfrentamos a diferentes desafíos improvisando, superamos el miedo a cometer errores, y desarrollamos confianza en nuestras habilidades. Esta confianza se traslada directamente a nuestras interacciones cotidianas, incluso si es en un idioma extranjero.
Mejora la comprensión y expresión oral
En la improvisación teatral, debemos estar atentos a las palabras y acciones de nuestros compañeros de escena para poder responder adecuadamente. Esto nos entrena para mejorar nuestra comprensión al escuchar, afinando nuestras habilidades para captar matices, entonaciones y expresiones idiomáticas. Asimismo, al improvisar, practicamos la expresión oral de una manera auténtica y dinámica y, para ser correctamente escuchados, mejoramos nuestra pronunciación y dicción.
Fomenta la espontaneidad
Una de las claves de la improvisación teatral es entrenar la capacidad de reaccionar rápidamente y de manera espontánea. Trabajamos en reducir la censura que nuestro juez interno ejerce sobre lo que vamos a hacer o decir, permitiéndonos el error y liberándonos para poder actuar de manera más rápida.
Si además las clases de impro se hacen en ese idioma, nos vemos obligados a pensar y responder en tiempo real, sin la oportunidad de traducir mentalmente desde nuestro idioma nativo. Esta práctica ayuda a desarrollar fluidez y naturalidad en su expresión oral en el contexto laboral.
Estimula la adaptabilidad
La improvisación teatral requiere que pensemos rápidamente y generemos ideas sobre la marcha. A través de esta práctica, estimulamos nuestra creatividad, aprendemos a ser más flexibles en nuestra expresión y a encontrar soluciones a medida que surgen. Esta capacidad de adaptación es especialmente valiosa en un entorno laboral multicultural, donde a menudo nos enfrentamos a situaciones inesperadas y debemos adaptarnos a ellas de forma eficiente.
La historia de Juan es la de alguno de los alumnos de nuestra escuela. Y demuestra cómo la improvisación teatral puede ser una herramienta poderosa para adquirir fluidez en el habla de idiomas. Mediante el entrenamiento de la impro, no solo mejoramos nuestras habilidades creativas o teatrales, sino que también fortalecemos la confianza, y la capacidad de adaptación en diferentes contextos comunicativos y así encontrarnos más cómodos hablando otros idiomas.
Si te encuentras en una situación similar, donde debes trabajar en un entorno internacional y comunicarte en un idioma extranjero, considera explorar la improvisación teatral como una forma divertida y efectiva de mejorar tu fluidez. ¡Descubrirás que la impro teatral puede ser una gran aliada en tu viaje hacia el dominio del idioma!
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